Estados Unidos anunció el final de La Niña, que causó una severa sequía en Argentina y la región.
El final de La Niña fue anunciado por NOAA, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica, que es una agencia científica del Departamento de Comercio de los Estados Unidos cuyas actividades se centran en monitorear las condiciones de los océanos y la atmósfera.
Ahora, parecería que viene El Niño para la temporada 2023/24:
En Argentina, el Servicio Meteorológico Nacional advirtió que todavía no vamos a ver mucha variación en las precipitaciones: "A pesar del cambio en la temperatura del océano, la atmósfera todavía se mantiene con una circulación acorde a la de La Niña".
La Guía Estratégica para el Agro de la BCR repasa que, las condiciones atmosféricas de la primera semana de marzo, tal como ocurrió durante febrero, siguen derrumbando las expectativas de un alivio para la castigada campaña gruesa 2022/23.
Las precipitaciones escasas, y las temperaturas extremadamente altas, que se han mantenido por un periodo inusualmente prolongado, muestran una continuidad del comportamiento que caracterizó todo el semestre cálido. El comienzo de marzo, lejos de aportar un cambio de escenario, está sosteniendo la presencia de muy altas temperaturas, récords para las máximas del mes, y lluvias de escaso volumen y errática distribución.
Es necesario retroceder hasta enero para encontrar precipitaciones generalizadas y de volumen generoso. A partir de ahí, el ambiente seco o con lluvias por debajo de las normales prevalece en la mayor parte del centro del país. Como agravante, los primeros siete días de marzo se han sumado a ese comportamiento. Contrariamente a lo ocurrido en el centro de la región pampeana, los acumulados mensuales han sido generosos sobre el norte del país.
El NOA y el NEA se vieron favorecidos por sistemas precipitantes de buen volumen que, puntualmente, incluso superan los valores del mes. En menor grado, sobre la franja oeste de la región pampeana, el oeste de Córdoba, norte de La Pampa y San Luis recibieron lluvias moderadas pero siempre bienvenidas para proveer algunas recuperaciones zonales.
El aporte de agua también tuvo una leve presencia sobre el sudoeste bonaerense pero con una oferta más escasa. Los registros se vuelven mucho más bajos o incluso inexistentes a medida que avanzamos hacia el noreste, fundamentalmente sobre la zona núcleo, donde la continuidad de la sequía se manifiesta con su mayor intensidad.
En los últimos cuarenta días solo áreas acotadas recibieron lluvias dentro de las normales o incluso superiores a los valores estadísticos. Esta distribución se evidencia claramente en los mapas de disponibilidad hídrica. Lamentablemente la recuperación de los perfiles a niveles cercanos a los óptimos ha quedado lejos de las regiones que pueden ser consideradas como proveedoras de los mayores volúmenes de maíz y soja.
"Los modelos meteorológicos muestran la fuerte presencia de un sistema de alta presión, provocado por la posición del anticiclón del Atlántico, sobre la franja este del país. Este escenario afectará de manera negativa el posible desarrollo de precipitaciones en los próximos días sobre el este de la región pampeana", concluyen desde la BCR.
Fuente: AGROFY